Antes de la reforma del Concilio Vaticano II, el 11 de octubre se festejaba el día de la Virgen María.

Para asegurar que se iba a poder agasajar a las madres en su día, comenzó a celebrarse el domingo anterior o siguiente, por ser una jornada no laborable y de esa manera tener el día libre para visitarlas. Con el paso del tiempo, la costumbre cambió y se determinó que sería el tercer domingo de octubre.

Los motivos por el cual se cambió de fecha no están del todo claros. Hay muchas teorías que creen que se fijó así por algo meramente comercial.

Los origenes del dia de la madre se remontan en la Antigua Grecia y en Roma. En Grecia, se rendía homenaje a Rea, que era la diosa de la fertilidad y madre de Zeus, Poseidón y Hades.

En Roma, los antiguos romanos rendían su culto a Cibeles, que era la diosa de la madre tierra y símbolo de la fertilidad.

Los cristianos transformaron las celebraciones en un homenaje a la Virgen María, como es el caso de países como Panamá. Allí se celebra el día de la Inmaculada Concepción, que es el 8 de diciembre de cada año.